Como lo dice su nombre, esta sesión es súper divertida porque el pequeñín destroza su pastel, con un set temático y original, se crean los mejores recuerdos de esta bella etapa de descubrimiento donde pasa a ser un pequeño caminante curioso, y quiere comerse el mundo.
Regularmente se realiza entre los 10 y 12 meses de edad. La decoración y pastel se escogen en conjunto.
Después de reservar, conversamos para escoger los colores, diseños, tus gustos y preferencias, para hacer esta sesión única y original.
Realmente es una sesión colorida, con sabores, texturas y objetos nuevos.
Cada pequeño es diferente, a muchos les encanta, embarrandose hasta las orejas, mientras que otros apenas y lo tocan.
¡Les aseguro que será una experiencia que vale la pena retratar y recordar!
…Lo cierto es que no en todas las etapas de la vida uno se puede embarrar con locura de pastel.